Llegan las Navidades y con ella los excesos: gastamos más de lo que tenemos, comemos como si fuera el último día y bebemos como esponjas... Tiramos la casa por la ventana como si durante el año hubiéramos llevado una vida de economía franciscana y eso es lo más alejado de la realidad. La mayoría de las familias comen y gastan durante el año per encuentran en estas fchas el pretexto perfecto para pasarse en todos los aspectos sin mirar la caja de los ahorros como si lo fuera a pagar otro. Es así como muchos se hunden en la depresión cuando comienzan a llegar las facturas y pagarlas se convierte en una tarea casi imposible.
Cuántas personas se someten a rugorosas dietas de adelgazamiento para poder embutirse en el odelito nuevo para la fiesta de fin de año mientras otros no lo pasarán tan de maravillas. El consumismo es una enfermedad social que afecta gravemente a los países ricos de occidente. Gastar, gastar y gastar sin medida ni freno en ropa, comida, bebida, la mente en blanco ante el consumo sin detenerse a pensar en que alguien , tal vez muy cercano, tl vez pase las Fiestas solo, sin que nadie lo salude, le diga: "Feliz Navidad".
Esto no significa que no debamos pasrlo bien y disfrutar de estas fechas; pero nos conviene a todos ser solidarios y eso no significa dar lo que nos sobra, sino compartir. Es verdad que tendríamos que hacerlo durante todo el año y no sólo en Navidad. Además conviene pensar también en nosotros y no maltratar nuestra salud.
Sócrates decía: "Nada en demasía". Nada, ni siquiera lo más valioso, ni lo más saludable, ni lo más placentero es bueno en exceso. Dicen que las riquezas y el dinero desmedido corrompen, que no es más rico el que más tiene sino el que menos precisa. Así que, estas Navidades, antes de lanzarte sobre las cosas para comerlas, de ir de brindis en brindis, de gastar a lo loco en regalos inútiles, tómate unos minutitos para pensar en los tuyos, en lo que quieren, en aquella persona que está sola y podrías invitar a casa o pasar a visitarla un rato en Navidad. un esto de cariño puede más que el regalo más costoso...
EstiloSalta.com les desea una Feliz Navidad llena de alegría y sin ningún exceso.
