Con todos los cuidados, no conseguiremos evitar la aparición, tarde o temprano, de las arrugas porque los cambios estructurales de la piel se dan con la edad de manera inevitable.
La piel está compuesta por dos capas principales:
- Epidermis: Es la capa exterior, la que se ve y la que ven los demás. Actúa como escudo para impedir la salida de los líquidos corporales y evita la entrada al interior de agentes agresivos pero también es, seguramente, la que más sufre ante los factores externos como el sol, la luz, el viento.
- Dermis: Es la capa interior, que proporciona apoyo, alimento y humedad. Allí se determina el contorno de la piel, siendo la responsable del tono y de la flexibilidad de la misma.
La piel es una estructura viva constituida por una red de tejido de sujección muy fuerte entrelazados por fibras elásticas y vasos sanguíneos que transportan agua y elementos nutritivos. Esa red de tejidos es el colágeno, fundamental para la estructura de la piel y cuya producción disminuye con los años, es por eso que las cremas lo incorporan para mejorar nuestra piel.
La piel envejece de forma gradual, pero este proceso puede retrasarse o invertirse... ¡dentro de un límite!
Los ojos y el cuello delatan nuestra edad...
El envejecimiento produce una alteración en la capa interna que muestra un tejido de sostén fláccido, mientras van apareciendo líneas, arrugas y marcas, resultando más afectada la piel del contorno de ojos y la del cuello.Las necesidades de la piel, en cuanto a tratamientos y productos cosméticos, están en función de su tipo, y queda determinado por su textura, color y estado.
Existen tres tipos de piel: Grasa, seca o normal, aunque la mayoría de las pieles son una mezcla de grasa y seca.
Piel grasa
Es la piel que mejor envejece, ya que siempre presenta pocas arrugas y mejora con el paso del tiempo. Su mayor problema consiste en combatir el exceso de grasa que, si se realiza con productos muy agresivos, pueden realizar un efecto rebote y acusar este maltrato al cumplir años.
Piel seca
Es la que se descama y pela con facilidad, llegando a presentar arrugas y líneas a edades tempranas, especialmente alrededor de los ojos y de la boca. Le afecta mucho el no ser tratada con los productos cosméticos adecuados, así como el empleo de jabones fuertes, la exposición al sol o al viento y los cambios bruscos de temperatura.
Piel mixta
Es una piel entre grasa y seca que presenta sebo en la Zona T (frente, nariz y mentón) y sequedad en las mejillas y el contorno de ojos y la boca, zonas con predisposición prematura a las arrugas.
Piel normal
Con una textura fina, sin poros visibles, lisa y suave al tacto, nada grasienta, aunque tiende a resecarse con el tiempo. Así es la piel equilibrada, que tiene compensadas la humedad, la grasa y la acidez.
Cuidados desde muy joven
Cuanto antes comience el cuidado del rostro, más tarde aparecerán las arrugas, las manchas y la flaccidez.
Esta nueva tendencia ha dado como resultado el lanzamiento de productos exclusivos para chicas jóvenes que se inician en el mundo del cuidado facial.