El modo en que nos lavamos el pelo es muy importante porque ayuda a lucir un pelo suave, sedoso y brillante o, por el contrario, una melena opaca y difícil de manejar. Un buen lavado es el primer paso para un pelo sano y saludable. Debemos tener en cuenta que los excesivos lavados o usar demasiado champú pueden resecar el cabello.
Hay que evitar estrujar el pelo tras el lavado para evitar quebrar la fibra y dañar el cabello.
Decálogo de un buen lavado
1- Cepillar el cabello antes del lavado para eliminar polvo y desenredar.2- Mojar bien el pelo con suficiente agua.
3- Colocar una pequeña cantidad de champú en la palma de la mano y aplicar con la yema de los dedos y masajear suavemente.
4- Evitar el uso de las uñas. Comenzar masajeando la raíz del cabello y poco a poco extender por todo el pelo. Las raíces necesitan más limpieza que las puntas.
5- Mojar con agua tibia sin estrujarlo hasta eliminar por completo la espuma, el agua caliente reseca el cabello, abre las cutículas del pelo, el agua tibia o al tiempo las cierra dejando el pelo más sedoso y brillante.
6- Repetir el lavado para que quede perfectamente limpio.
7- Colocar el acondicionador acorde al tipo de cabello.
8- Secar el pelo con una toalla sin estrujar. Antes de cepillarlo, usar un peine de dientes abiertos o los dedos para que el pelo quede más ligero y fácil de secar. Siempre es mejor dejar secar naturalmente y utilizar el secador lo menos posible.
9- No te dejar la toalla enrollada en la cabeza porque daña la estructura del cabello.
10- Las mascarillas son muy útiles para el pelo muy castigado por la tintura del pelo, mechas, reflejos, el sol, el cloro y el viento, entre otros factores.
