Esta antigua casona conserva el típico estilo de Cachi. Es una casona de pueblo propiedad de la familia Bergesi.
Para hacerla más confortable y poder incorporar las más modernas comodidades, ha sido reciclada receintemente pero sin tocar su fachada y cambiando lo menos posible para que el espíritu se mantenga. Ha ganado en confort y servicios. Cuenta con un amplio comedor, calefacción central, teléfono, internet y televisores. El adobe, la piedra, la caña, con muebles antiguos, dispuestos en las salas, lámparas, arañas y obras de arte se conjugan perfectamente para crear un ambiente cálido, acogedor donde "te dan ganas de estar".
La casa cuenta con doce habitaciones, todas de diferentes tamaño, forma y ambientación. Cada una tiene una temática distinta y toman un nombre, pensado cuidadosamente, para ofrecerle algo muy particular a sus huéspedes. Cada una tiene algo que la distingue de la otra, ya sea su tamaño, la decoración, la arquitectura pero todas buscan albergar al viajero, hacerlo sentir en casa y que su descanso y bienestar sean lo más importante.
El servicio y la recepción atienden las 24 horas. Y en los desayunos y las meriendas podemos disfrutar de tartas y mermeladas caseras, panes dulces y salados recién hechos.
Al atardecer nos esperan con una picadita de quesos y fiambres en el patio o la galería. Se puede acompañar con los mejores vinos en sus variedades de blancos y tintos, y se encuentran en su exclusiva bodega. El colmo del mimo es que, antes de dormir, te sirven una copita de Mistela para descansar super relajados...
Si te interesa saber la ubicación, precios y reservas, visita su página web donde encontrarás toda la información que desees y podrás contactar con ellos.