Los polvos bronceadores están enriquecidos, son muy ligeros y se adaptan a cada tono y tipo de piel. Mate, con brillo, destellos dorados, nácar, hidratantes... para todos los gustos y bolsillos.
Comienza a aplicarlos en los lugares donde normalmente la piel se broncea antes como la parte frontal y lateral de las mejillas y las sienes. A continuación, aplica el color suavemente sobre todo el rostro realizando movimientos circulares. No olvides aplicar un ligero toque sobre el cuello y la nucaespecialmente si vas a recogerte el pelo.
Se puede aplicar por todo el rostro y el escote para conseguir un efecto bronceado sutil y uniforme o sobre las mejillas como colorete. Siempre de a poco sisn darte brochazos alocados orque el erro ya no tiene arreglo y quedarás "hecha un fuego".
Poquito a poco y probando hasta encontrar el punto justo de naturalidad, frescura y tono saludable y bronceado que quieres.