Te presentamos una serie de consejos útiles a la hora de servir el champagne y poder disfrutar en plenitud.
- Para enfriar el champagne lo mejor es ponerlo en una cubetera con suficiente agua, hielo y sal para ayudar a mantener la temperatura. El congelador o el freezer son demasiado 'fuertes' para el frío que queremos obtener.
- Para abrir la botella, lo primero es verificar la temperatura adecuada y luego secar bien la botella para que no se resbale. Apoyar la botella sobre una base sólida.
- Buscar la pestaña que traen las botellas en la cápsula, sujetar a esta por debajo de la pestaña para que no se rompa y luego con la mano retirar la pestañita.
- Hecho esto, se enfrentará el canastillo. Para retirarlo, dar las vueltas necesarias.
- El corcho es lo más 'difícil' pero no imposible de afrontar. Hay que poner la botella en un ángulo de 45° sujetándola por abajo y tomando el corcho con fuerza por el otro extremo; girarla suavemente desde abajo y controlar el corcho que irá cediendo.
- Hacer volar el corcho por los aires, además de peligroso porque podemos hacer daño a alguien, desperdicia el champagne que saldrá en chorro. Eso se lo dejamos para los pilotos de Fórmula 1...
- Limpiar el pico de la botella por si queda algún residuo.
- Al servir, se debe inclinar la copa y llenar lentamente hasta la mitad para mantener la temperatura adecuada.