Si quieres conocer a la nueva diva de la ópera, no puedes dejar de leer este artículo que le dedicamos a Anna Netrebko, la rusa más famosa y popular de la lírica actual. Como hizo su debut en muchos de los principales teatros de ópera durante el año 2002 y 2003, la soprano rusa Anna Netrebko se convirtió, en palabras del Mail on Sunday "en un golpe sensacional para la ópera en muchos años". Poseedora de un gran lujo, distintivo canto de voz y de una buena apariencia que la hace lucir grandiosa en los escenarios, Netrebko también ha atraído a los aficionados a la ópera con su carisma espectacular y con un carácter impulsivo y una personalidad sincera que ha presentado a la opinión pública. Netrebko es, en definitiva, una verdadera diva, que trae a la mente a las grandes mujeres cantantes de ópera del pasado y tiene el potencial de sacar nuevos, más jóvenes aficionados al género. Netrebko nació el 18 de septiembre de 1971, en el suroeste de la ciudad rusa de Krasnodar. Aunque su padre era un geólogo y su madre, una ingeniera en telecomunicaciones, entiende las artes escénicas de inmediato. "Baile, acrobacia, atletismo, canto. Sabía que iba a ser en el escenario", dijo a Mail on Sunday. "Todo el mundo sabía". En la escuela secundaria se dedicó a la gimnasia y el ballet y cantó en su coro. En 1988 se matriculó en el Conservatorio de San Petersburgo. Sin embargo, el colapso del sistema comunista al año siguiente sacudió a la joven Netrebko, y el posterior período de agitación económica era apenas favorable para la consecución de una carrera en las artes.
No obstante, Anna Netrebko buscó maneras para destacar de la multitud. Inicialmente, con la esperanza de convertirse en una actriz, tomó cursos de canto como una forma de distinguir entre otros jóvenes artistas intérpretes o ejecutantes en la escuela. Pero lo que ella había planeado como una habilidad secundaria rápidamente se convirtió en su principal interés. Ella cambió, dijo el Christian Science Monitor, cuando fue al teatro y vio la ópera, y, por supuesto, la primera vez que empezó a cantar en el escenario. Teatro y ópera es mucho más interesante y complicado. Todo está junto. Finalmente a Netrebko se la conocee como un artista que devolvió el teatro a la ópera, convirtiéndola en algo más que sólo una hermoso vehículo para el canto.
Pero Ana Netrebko se jugó todo en la década del `90 al tomar un empleo como portero en el Teatro Mariinsky de San Petesburgo, para poder asistir a espectáculos de ópera y allí ver y oír a los principales cantantes en persona. "Yo podía ver los ensayos y actuaciones. Yo estaba en el teatro veinticuatro horas al día", dijo. Una historia que circula por ahí, es que ella fue descibierta por la estrella rusa Valery Gergiev mientras lavaba los pisos en el teatro. Anna Recuerda que, años más tarde en una audición con Gergiev, él le dijo: "¡Oh! ¿Además puede usted cantar?", y considera que la suya es una verdadera historia de Cenicienta.
Pero la suya no es solo un cuento de hadas. En 1993 ganó la importante Competencia Vocal Glinka de Moscú. Esto la llevó a una aparición en un concierto de la Bolshoi Opera organizado por la líder ruso mezzo-soprano Irina Arkhipova y, a continuación, Gergiev a la audición. Luego Anna Netrebko tuvo su debut en San Petersburgo en la Opera de Kirov en 1994, como Susanna en un ejercicio de Wolfgang Amadeus Mozart la ópera Las Bodas de Fígaro, dirigida por Gergiev. Desde el comienzo, Netrebko hizo roles de ópera en italiano y alemán, así como en el idioma ruso partes tradicionalmente cultivada por cantantes de Rusia.
Aparece con frecuencia en el Kirov, y se dio a conocer al público americano en 1995 en la San Francisco Opera con la producción de Mikhail Glinka Ruslan y Lyudmila, una vez más llevadas a cabo por Gergiev. El papel encaja perfectamente Netrebko, con su exuberante voz. Su ejecución marcó el comienzo de una historia de amor entre Netrebko y San Francisco, el público y los críticos, y ella hizo varias visitas de ópera y conciertos en los años siguientes.
En ese momento, Netrebko era aún, en gran medida, desconocida para la audiencia internacional de ópera, pero a lo largo de los próximos dos años su perfil se elevó considerablemente. Ella hizo su debut en Nueva York en 1998, con papeles en producciones de gira por la Opera de Kirov en el Metropolitan Opera. En la temporada 1999-2000 cantó ante el Príncipe de Gales, en Gran Bretaña, en la Opera Real en Covent Garden, en el papel de Natasha Sergei Prokofiev en Guerra y Paz. Esto fue una parte que parece especialmente apropiado para ella, dado su parecido físico a la actriz Audrey Hepburn, quien también ha desempeñado a Natasha en la película de 1956 adaptación de Leo Tolstoi de la clásica novela.
En el año 2000, la carrera de Netrebko se dispara hacia arriba. Ha trabajado casi sin interrupción durante cuatro años. Ella siguió tomando lecciones de voz, con el estudio de renombre soprano Renata Scotto. Netrebko supera su desafío más grande - su debut oficial en Nueva York del Metropolitan Opera en febrero de 2002 - con los colores de vuelo. De su desempeño como Natasha en Guerra y paz. Los observadores especularon con que para Netrebko el mayor desafío en los próximos años podría ser ella misma por el ritmo de su carrera, una impresión reforzada cuando el cantante canceló un par de espectáculos a finales de 2003, alegando agotamiento.
En esa época la mayor parte del mundo operístico se enamoró de Netrebko. Ella desconcierta a los críticos con sus salidas de compras y visitas a discotecas neoyorquinas. Aún en sus primeros 30 años - los jóvenes para una estrella de ópera - y aún en desarrollo vocal, que combina la capacidad de canto y presencia dramática de forma que las comparaciones señaló a la ópera más dramática de la actriz del siglo XX, Maria Callas. Ana es representativa del futuro de la ópera como teatro musical. Fan de la música pop, Netrebko también aparece como un atractivo para los aficionados más jóvenes a la ópera.
Realiza la grabación de su disco debut, Anna Netrebko: Opera Arias, fue publicado en el sello Deutsche Grammophon a fines de 2003, y propulsada por su floreciente carrera aún mayor. El cielo parece ser el límite para la joven diva de Krasnodar.
En septiembre de 2008 ha sido madre de un niño junto a su esposo el cantante de ópera uruguayo Erwin Scrotter. Han declarado sentirse plenos y llenos de energía para continuar con su carrera y Ana ya tiene preparada su agenda de actuaciones para el año 2009.
Si quieres saber más sobre esta brillante y atractiva cantante de ópera que, seguramente, se convertirá en la diva de este siglo, puedes visitar su web oficial: www.annanetrebko.com
